La Plaza de Arequipa es el espacio más importante del Centro Histórico de la Ciudad, rodeado de portales de sillar, la pileta central y Tuturutu, y con la presencia imponente de la Catedral, pero esta configuración no siempre fue igual; la forma con la que conocemos actualmente la plaza es consecuencia de una serie de modificaciones sufridas a lo largo de los años por consecuencia por eventos desafortunados, como incendios y terremotos. El proyecto lo que busca es poder hacer evidentes las distintas capas de intervenciones anteriores, capas superpuestas y que evidencian la evolución del espacio, pero que se encuentran ausentes del imaginario actual.